Quiero que sea verano ¡ya!

¿Y quién no...?

Vuelve...

Enciendo mi iPod decida a escuchar música. Después de cantar una de mis canciones favoritas, decido ver las fotos que tengo metidas en ese pequeño aparato. Y entonces... veo una tuya. La examino durante segundos, incluso minutos. Ni me acordaba de esa foto. Mil recuerdos aparecen frente a mis ojos, como si fuera una película sobre todos los momentos que estuve junto a tí. Tan solo fueron 3 meses, pero a mí me pareció toda una vida. Recuerdo cuando nos enfadábamos pero al poco tiempo estaba olvidado. Cuando me decías algo qeu hacía que me pusiera muy roja. Cuando te acercaste a mí preocupado y me preguntaste a ver qué tal. Cuando nos leíste aquel poema que casi hizo que se me saltaran las lágrimas... ¿Sabes? Hay veces que te odio por hacerme sentir esto que siento en mi interior. Es una sensación rara, no podría describirla con palabras. Tampoco vives tan lejos, pero sé qeu e smuy poco probable que coincidamos algún día, casi imposible. Solo quiero que vuelvas a entrar por esa puerta con una sonrisa que haga que la mañana sea más llevadera...

Good Riddance (Time Of Your Life)

Otro punto de cambio, una encrucijada en el medio del camino. El tiempo te agarra de las muñecas y te dice hacia dónde ir. Asique haz lo mejor en esta prueba y no preguntes por qué. No es una pregunta sino una lección que se aprende con el tiempo. Es algo impredecible, pero al final está bien. Espero que tengas el momento de tu vida.
Asique toma las fotografías y manten las imágenes en tu mente. Cuélgalas en un cuadro de buena salud y buenos momentos. Tatuajes de memorias y piel muerta son la prueba de que vale la pena. Vale la pena todo el tiempo. Es algo impredecible, pero al final está bien. Espero que tengas el momento de tu vida.

Welcome To Humanoid City

Es increíble que tan solo queden 42 días... 42 días para verles a ellos y 42 días para verlas a ellas. Sé que sin esas personas, nada sería igual, y cuándo digo nada, es NA-DA. Todavía no me lo creo. Parece que fue ayer que mi madre me dijo qeu sí que me dejaba ir al tan esperado concierto. Parece que fue ayer cuando Maialen y yo fuimos a comprar las entradas, que al final no tenían en el Corte Inglés y su padre nos las tuvo que comprar en la Caixa. Me acuerdo de lo feliz qeu estuve cuando me la dio en el instituto y yo se la enseñé a todo el mundo jaja.

Han pasado más de 100 días desde entonces. Sí, 100 días. Se dice pronto. Y durante esos días he conocido a gente que probablemente son algunas de las personas más importantes para mí. Me muero de ganas por darles un gran abrazo y verlas ese 5 de abril de 2010.
Encima, este trimestre me estoy poniendo las pilas para sacar las mejores notas. Necesito ese concierto para por lo menos tener un fecha inolvidable en la que pude ser feliz.

Asique...
Welcome To Humanoid City.

Happy B-Day Mr. Armstrong♥

Hoy cumple 38 años una de las personas que más admiro.
Un hombre que desde que lo conocí siempre ha estado ahí, en los malos momentos para animarme y en los buenos para animar la fiesta.
Alguien que tiene una voz increíble y no puedo pasar ni un solo día sin escucharla; ya sea cantando, en un entrevista o soltando alguna palabrota.
Alguien que tiene una exitosa carrera musical con su grupo de punk-rock.
Alguien que se llama a sí mismo George W. Bush cuando se presenta en los conciertos.
Alguien que dice que es el hijo del odio y el amor, de una puta y Edgar Allan Poe.
Alguien que se define a sí mismo cómo el Jesús de los Suburbios y es un caso perdido.
Alguien que se mira por las mañanas en el espejo y afirma ser Dios.
Alguien que grita en los conciertos que le follen a él.
Alguien que se masturba en los conciertos.
Alguien que grita como un poseso en los conciertos.
Alguien que está casado con la única mujer de la que se ha enamorado en su vida.
Alguien que quiere que sus hijos no sean el macho anormal que es él.
Alguien que dice admite ser bisexual y no avergonzarse de ello.
Alguien que está cómo una puta cabra y vendía porros a dos dólares, de ahí su mote Two-Dollar-Bill.
Alguien a quien echaron del colegio un día antes de cumplir los 18.
Alguien a quien llevo esperando ver en un concierto desde los 11 años junto a Mike y Tré.

Felicidades Imbécil♥

I miss you...

Mi padre entró aquella mañana en mi habitación.

-Itziar, ¿estás despierta?-preguntó.
-Sí-respondí con voz adormilada-. ¿Qué pasa?
-Tu abuela ha muerto.
-¿Qué?-pregunté sin creérmelo. Deseé con todas mis fuerzas que solo fuera un sueño, un mal sueño.
-Tu madre ha ido al tanatorio con tu tío. Levántate, nosotros también tenemos que ir.-salió de mi habitación y cerró la puerta detrás de él.

No, no podía estar pasando. Hacía dos días que la había visto en la residencia. Estaba demacrada y demasiado delgada. Nada más entrar en su habitación quise salir, no aguantaba aquella escena.
En ese momento me arrepentí de todo lo que pensé en al residencia. Quería estar junto a ella aunque fueran 5 minutos más, pero no podía. Me hubiera gustado decirle lo mucho que la quiero, pero ya era demasiado tarde.
En el tanatorio me invitaron a verla. Pero no quise, me derrumbaría al ver su cuerpo sin vida.
A la salida del tanatorio, cuando ya la metieron en el coche fúnebre para llevarla al cementerio, vi a mi madre y a su tía llorando. Las pocas fuerzas que tenía para evitar llorar se derrumbaron y las lágrimas empezaron a caer por mis mejillas. Mi padre me abrazó dándome ánimos.

Aquello ocurrió en febrero de 2008. Fue el día más triste de mi vida y parece estar grabado con fuego en mi memoria, porque por mucho que intente olvidarlo, no puedo...

Sueños Rotos

Una vez más, me siento en el suelo de mi habitación y apollo la espalda contra la cama. Hecha un ovillo me pongo a llorar en silencio. No lo puedo evitar, tengo demasiada presión en mi cuerpo. Siento que no puedo más, que no puedo seguir con una vida así, llena de odio, dolor y llantos. Levanto la cabeza y miro el objeto más preciado que tengo en mi habitación: mi guitarra. Aún recuerdo la felicidad que me entró cuándo me la regalaron las Navidades pasadas. Me levanto y voy a por ella, para luego volverme a sentar en el mismo sitio de antes. La coloco encima de mis piernas y empiezo a tocar una de las canciones que me sé. Todavía tengo que mejorar. Sin darme cuenta, las lágrimas han cesado. Ese instrumento es el único que mantiene mi esperanza viva para alcanzar mi sueño. Es difícil de alcanzar, pero sé que si luecho por él, lo conseguiré. No quiero tener más sueños rotos.